Mujer Piscis

El último signo del zodíaco es el signo de agua Piscis. Esta mujer es madura y bien desarrollada. Ella tiene un montón de amor y devoción y este es su mejor activo. Es capaz de comprender los problemas de la gente. Se imagina cosas maravillosas hoy para evadirse de las realidades de la vida mañana.

A la mujer Piscis le encanta ayudar a los demás y lo hará siempre que pueda. Da apoyo y es considerada. Si ella tiene amigos que pueden confiar en ella cuando están en problemas. Esta mujer es muy romántica y puede atraer fácilmente al hombre que desea con su naturaleza amorosa y femenina. Quiere que su pareja esté a su lado en todas las situaciones para sentirse segura en el amor. relación. Se sacrificará en la sociedad por el hombre que ama.

Le gustan los trabajos que le dan cierta libertad. Le gustan los trabajos creativos que despiertan su imaginación. Puede ser lenta en el trabajo debido a su indecisión. Puede no ser capaz de tomar decisiones rápidas y puede soñar despierta, lo que puede repercutir en su trabajo. Este signo es sensible a los problemas de los demás y suele sufrir con ellos. También es soñadora, escapista e indecisa. A menudo puede involucrarse demasiado en los problemas actuales de los demás y olvidarse de sus propios problemas e identidad.

Mujer Piscis es una fascinante mezcla de pasión terrenal y fantasías extraterrenales. No es de extrañar que los hombres queden cautivados por ella a primera vista y se sientan perseguidos por ella para siempre. Puede que intenten recordar qué hay en ella que resulta tan encantador, pero no pueden sondear las profundidades de su seductor encanto. Su habilidad para atraer a los hombres es asombrosa. Tiene una habilidad instintiva para hacer que los hombres se sientan masculinos. Su dulzura, suavidad e inocencia les hacen sentir fuertes y protectores.

Una mujer Piscis no elige a su pareja por capricho del momento. Como todos los signos de agua (CáncerEscorpio, Piscis), tiene una manera misteriosa de descubrir los secretos que se esconden bajo la máscara social de una persona, y su visión psíquica le permite ver los verdaderos motivos. Sensible al más mínimo matiz en lo que alguien dice o en cómo se comporta, se marchará rápidamente si lo que ve y oye no le parece correcto.

Los amantes que elige una mujer Piscis tienden a caer en dos extremos. Como necesita que la necesiten, se siente atraída por hombres emocionalmente discapacitados a los que pueda cuidar y envolver con compasión. También se enamora del tipo opuesto de hombre, uno que sea fuerte, decidido, con un gran sentido de sí mismo, un hombre que la proteja y la quiera, y le dé el apoyo y la dirección firme que necesita.

Para ella, el amor es el lastre, el centro del que irradia todo lo demás. Cuando es feliz en el amor, todo lo demás en la vida le parece maravilloso. Cuando se siente desdichada por una aventura amorosa, nada más importa. Su mayor necesidad es perderse en otra persona, unirse en una comunión casi mística. Quiere entrar en la psique de su amante. Piscis, más que ninguna otra mujer del zodíaco, cambiará para adaptarse a la imagen que desea su pareja. Es un signo mutable y totalmente adaptable. Sin embargo, esta mujer de mil caras sigue siendo ella misma: esquiva, intocable, misteriosa. Ejerce una fascinación que nadie acaba de comprender.

Los encantos de la mujer Piscis pueden ser demasiado sobrenaturales. Las ensoñaciones son su verdadera realidad. Una de las muchas cosas que los hombres encuentran fascinantes en ella es que puede dar plena expresión a sus fantasías sexuales. La mujer Piscis es experta en todas las variedades de juegos eróticos y puede emplear las habilidades de una cortesana para aumentar el deleite de su amante.

A veces, su carácter afectuoso y desbordante se convierte en dependencia. Pero su intuición psíquica le permite saber cuándo ha llegado al límite de la paciencia de un hombre. Si lo desea, puede tomar medidas para recuperar el favor de un hombre. Sin embargo, a veces se vuelve susceptible ante la incomprensión de los demás. Lo que más necesita es paciencia y simpatía. No soporta el más mínimo rechazo. Sin embargo, cuando se la trata con cariño y afecto, el lado sensual y ultra femenino de su naturaleza sale a relucir. Tiene la capacidad de combinar en una misma relación un gran romance, un intenso vínculo sexual y una profunda comunión espiritual. El secreto para complacer a esta mujer etérea, poco mundana, sensible y de rápida reacción es no quedarse nunca corto en el romanticismo. Para ella, el romance es el aliento de la vida.